Buckley Gray Yeoman (BGY) apuesta por el desarrollo del diseño biofílico, que integra la naturaleza como parte estructural de sus proyectos y que pretende transformar las ciudades en vergeles. Centros de trabajo, casas, escuelas… no hay ninguno que evite su conexión con la vegetación.

 

El diseño biofílico, en su esencia, busca una simbiosis entre los entornos construidos y la naturaleza circundante, reconociendo los beneficios tangibles que esta conexión puede aportar a nuestra salud y bienestar. Aunque la idea no es nueva, su resurgimiento reciente responde a una necesidad apremiante en un mundo cada vez más desconectado de lo natural, especialmente en los núcleos urbanos. Este enfoque no solo busca crear espacios estéticamente agradables, sino también funcionales y propicios para el bienestar humano. Elementos como la presencia de plantas, la abundancia de luz natural, la integración de agua y la utilización de materiales y formas naturales, entre otros, son pilares fundamentales en este tipo de diseño. Sus beneficios son diversos y bien documentados, abarcando desde la reducción del estrés hasta el aumento de la productividad y la creatividad. En un mundo donde la calidad de vida laboral es un factor crucial, el diseño biofílico emerge como una solución viable y necesaria para mejorar los entornos de trabajo y, por ende, la calidad de vida de quienes los habitan.

El estudio londinense Buckley Gray Yeoman (BGY), galardonado como el Mejor Estudio de Arquitectura 2023 en Reino Unido por AJ100, no es indiferente a esta tendencia y ha consolidado su papel con este diseño en diferentes proyectos en Inglaterra y ahora, en España donde cuenta con oficina.

La delegación en España de BGY ha crecido exponencialmente en tan solo 3 años. En la actualidad está formada por seis profesionales del mundo de la arquitectura y el diseño, todos ellos con experiencia tanto nacional como internacional, que deben afrontar (de momento) cuatro ambiciosos proyectos en diferentes puntos de la geografía española.

En cuanto a proyectos de diseño BGY destaca el trabajo en el emblemático edificio barcelonés Diagonal Vertical. También en la capital madrileña y como confirmación de su privilegiada visión en cuanto a los nuevos espacios de trabajo, BGY va a desarrollar un nuevo edificio de oficinas en el distrito madrileño de Salamanca, concretamente en la calle Marqués de Mondéjar, que contará con una superficie de 14.000 metros cuadrados. Áncora 40, Tánger 66 y este futuro proyecto tienen en SkyLight en Madrid, el próximo edificio de oficinas que culminará en breve BGY en España, la confirmación del estudio como uno de los más punteros en la redefinición de los espacios de trabajo. En Madrid BGY trabaja intensamente en Boadilla Hills (Boadilla del Monte), un monumental proyecto living de aproximadamente 90.000m2, que no solo busca ofrecer viviendas, sino también crear una experiencia de comunidad que refleje el espíritu de una villa. En línea con el enfoque biofílico, este desarrollo urbano de 4000 hogares prioriza la conexión con la naturaleza y fomenta un estilo de vida más sostenible y saludable para sus residentes. Una de las características más destacadas de Boadilla Hills es su énfasis en los espacios compartidos y la promoción del transporte activo. En lugar de depender del uso del automóvil, se alienta a los residentes a caminar o andar en bicicleta para desplazarse, lo que no solo reduce la congestión del tráfico, sino que también promueve la actividad física y el contacto con el entorno natural.

Además, el diseño de Boadilla Hills integra de manera sensible los espacios ajardinados con los árboles protegidos del entorno existente, creando un ambiente armonioso y enriquecedor. Rodeado de exuberantes jardines y zonas verdes, este desarrollo residencial no solo ofrece un refugio urbano, sino también una conexión tangible con la naturaleza. Esta combinación de planificación urbana consciente y diseño biofílico demuestra cómo es posible crear comunidades que sean tanto vibrantes como respetuosas con el medio ambiente, promoviendo así un estilo de vida más equilibrado y en armonía con la naturaleza.

En un momento en que la sostenibilidad y el bienestar se han convertido en prioridades clave en la arquitectura y el diseño, el diseño biofílico se posiciona como una respuesta innovadora y efectiva a los desafíos contemporáneos. Al integrar la naturaleza en el corazón mismo de nuestros entornos construidos, estamos reconectando con nuestras raíces naturales y creando espacios que nutren el cuerpo, la mente y el alma. En última instancia, el diseño biofílico no solo se trata de crear edificios hermosos, sino de construir un futuro más saludable y sostenible para todos.